23 jul 2016

Infidelidad. Reconciliación y Arrepentimiento




Infidelidad. Reconciliación y Arrepentimiento



  1. El Arrepentimiento
  2. La Confesión
  3. Descubrimiento de una manera Imprevista
  4. Perdonar la Infidelidad
  5. El Trabajo de Reconciliación es en Pareja
  6. Ayuda Externa

La Infidelidad, es uno de los males sociales que están afectando a nuestras sociedades, de muchas maneras, tanto directa como indirectamente, y son muchos los hogares y familias en general quienes se han disuelto por esta causa, sin embargo, hay muchas personas que tienen valores muy arraigados, acerca de la familia y de el matrimonio, que prefieren optar por recuperar su matrimonio, bien sea la persona infiel, la persona afectada o ambos.
En este curso, se pretende orientar a las familias que realmente quieren hacer un esfuerzo y que de verdad no comprenden cómo empezar a restaurar lo que ya ellos consideran que se destruyo, y que aunque quieren recuperarlo, no saben cómo empezar de nuevo.

Capitulo 1.

El Arrepentimiento


El hecho de Arrepentirse por una infidelidad causada, es un tema muy polémico, ya que muchas veces, quedan las dudas de que la persona culpable esté realmente arrepentida, muchas veces, si en verdad hay arrepentimiento sincero, la persona afectada le cuesta creer de que en verdad exista tal arrepentimiento, pero todo dependerá del grado de confianza del que se haya estado unida la pareja antes de esta situación tan abrumadora.
Hay oportunidades, en las que la persona que falló, quiere hacer ver que esta arrepentida, porque no quiere perder algunos beneficios, o porque no quiere dañar su imagen, o porque considera que ama a su pareja, aunque se enlazó con otra u otras personas, y no quiere perder a la persona que ama, pero tampoco quiere dejar de hacer lo incorrecto, y es por eso que finge estar arrepentido, pero sea cual sea, la causa para inventarse un arrepentimiento, siempre cuando no es sincero, la verdad saldrá a la luz, y lo que está en oculto quedará al descubierto tarde o temprano.
También, existen muchísimos casos, en el que la persona está arrepentida de lo que ha hecho, pero se siente confundida, y quiere estar en ambos lugares a la vez, pero no sabe en cual lugar quedarse, sabe que alguien es su pareja legal, y la otra persona es una pareja que nunca debió aparecer, pero ahora que está, se siente muy confundido, y muchas veces esta confusión, no solo está determinada por sentimientos, sino por culpabilidad de hacerle daño a dos personas a la misma vez, y entonces hay culpabilidad hacia ambas personas.
Sea cual fuese el caso, lo ideal es que la persona infiel, medite seriamente acerca de su pareja anterior, la pareja con la que ha cometido la infidelidad, y las cosas que debe valorar entre una persona y otra, y preguntarse, que tiene más valor, y sobretodo, cuando hay niños a quienes se les está criando todavía, la decisión debería ser menos egoísta aún y pensar en el daño emocional que se le causa a los hijos cuando hay infidelidad, e incluso cuando hay divorcio.
Arrepentimiento, significa sentirse mal por lo que se ha hecho, y cambiar la conducta para no seguir cayendo en el error, es por ello, que la persona que expresa estar arrepentida, si de verdad lo está necesita meditar en ello, si simplemente hay un cargo de conciencia porque sabe que está obrando mal, o si en realidad, hay un arrepentimiento, porque de haber un arrepentimiento genuino, todo tiene que ver con dejar de hacer todo aquello que está mal.
Muchas veces, el paso inicial de arrepentirse, cuesta mucho, y aunque hay culpa, a la persona le cuesta dejar de hacerlo, y sobretodo encarar la situación y abstenerse a las consecuencias, pero el verdadero arrepentimiento es la mejor medicina para el alma, ya que queda libre de todo peso de culpa que no le deja andar libre y sin reproches, y a la misma vez le permite pensar que ya al dejar lo malo, se hace más fácil recuperar su hogar, pero mientras más tarde en arrepentirse, mas grande será el  daño, y masa difícil será el proceso de restauración del daño ocasionado.

Capitulo 2.

La Confesión


Este es un paso que sin duda, muchas veces las personas arrepentidas, no se atreven de dar el paso, y prefieren ocultar a toda costa su error, y mientras no se sepa mejor, y aunque hay momentos en que desean confesar la falta y así quedar libres, el sólo hecho de imaginárselo, les llena de temor, preocupación y ansiedad, y muchas veces optan por posponer la confesión, pero muchas veces en ese proceso de posponer y posponer, sin poder detener las consecuencias, muchas veces la infidelidad es descubierta antes de que la persona haya podido confesarle a su pareja que le era infiel, de que estaba arrepentido, y de que le costaba decirlo por miedo a perder su amor.
Muchas personas, se han atrevido a confesar, pero no han sabido cómo hacerlo, y entonces en vez de confesar el error, y tratar de darle tiempo a la persona herida, para que intente aceptar la situación, y recuperarse del shock emocional que produce tal confesión, cometen el error de decir, “te fui infiel, pero tú tienes la culpa porque tú….” Y esta acción, no conduce a buenos resultados, al contrario empeora la situación.  Además, otros, empeoran estas circunstancias, comparando a su conyugue, con la  pareja con quienes le han engañado, “ Es que tu no haces esto, pero tal persona sí”, “Es que no soy feliz a tu lado, pero con esta persona sí”, otros aún peor empiezan a comparar la manera de hacer el sexo con esta y la otra persona, eso es lo peor que se puede hacer cuando uno quiere reparar el daño ocasionado por una traición, y uno es el culpable de infidelidad, e intenta culpar al conyugue herido.
Analizando un poco estos ejemplos, e incluso otros muchos que han sido más dañinos sus efectos a partir del momento de una confesión mal encaminada, es que debemos hacernos unas preguntas:
-          ¿Cuál es la razón de mi confesión?
-          ¿A quién quiero de verdad a la persona herida, o a mi pareja con quien he sido infiel?
-          ¿Mi intención de hacer mi confesión es para reconocer mi error, o para culpar al otro de mi error?
-          ¿Es justo que si a esta persona la herimos con nuestra infidelidad, le añadamos más dolor, creándole una culpa adicional por lo que ella no ocasionó, aunque creamos que tenga la culpa en alguna medida?
-          Nos estaremos Confesando para cambiar la circunstancia, y acomodar lo que hicimos mal o para atacar al conyugue, por nuestra debilidad y falta de madurez, de no haber sabido resolver el asunto sin necesidad de serles infieles?
-          ¿La Infidelidad ayudó de algo al matrimonio? ¿Acaso no fue un error nuestro, por ignorancia al creer que era la solución?
La Confesión debe hacerse lo más pronto posible, y no permitirnos dejar que pase tanto tiempo ocultando una infidelidad, y mucho menos pasar tanto tiempo siendo infieles, porque aunque la confesión, es para tratar de reparar el daño, mientras más tiempo pase para la confesión, y mientras más tiempo dure el tiempo de infidelidad, mas difícil será tratar de curar la herida, que tal situación haya causado.
Hay otro aspecto, que cabe resaltar, no se vale hacer promesas al momento de la confesión, por ejemplo: “Te prometo que no volverá a pasar” Es importante decir, estoy muy arrepentido y no quisiera que volviera a pasar, porque no quiero volver a hacerte daño nunca más, pero decir, te prometo que jamás volverá a pasar, es una idea, que cuando se está muy herido, cuesta asimilarla y creerla, ya que la persona herida está muy vulnerada en este momento, y siente una confusión, y ya no sabe qué hacer, y sobretodo no sabe si perdonar o no, porque tiene miedo de que se lo vuelvan a hacer, y aunque se lo prometan que no volverá ocurrir, este miedo persistirá hasta que vuelva a empezar a recuperarse la confianza entre ambos, y ese es un proceso no tan sencillo, a veces tarda un tiempo en lograrse.
Hacer la confesión, también requiere de mucha prudencia, no todo se debe contar con todos los detalles, mientras más detalles íntimos se confiesen más difícil será sanar la herida, porque los recuerdos estarán allí haciendo efectos en la persona herida, pero si es necesario, contar las cosas importantes, acerca de esa relación, sobretodo los detalles que realmente sean necesarios contarlos, y aclarar dudas, pero lo que no sea necesario, por el bien de la persona herida es bueno no hacerlo, y sobretodo no tocar el tema a cada instante, salvo la persona herida, se sienta cómoda preguntando acerca del asunto,

Capitulo 3.

 Descubrimiento de una manera Imprevista


Muchas veces, las heridas emocionales causadas por las infidelidades, son mucho más duraderas y difíciles de sanar, cuando  en vez de haber sido confesadas, la pareja infiel es sorprendida en el hecho,  descubierta por otros indicios, o por otros testigos que sacan a la luz pública dicha infidelidad, sobretodo, cuando la persona ha negado muchas veces la situación cuando ha levantado sospechas por algún incidente en particular, o por varios indicios que llevan a sacar conclusiones referentes al tema.
Esta realidad, hace que muchas veces, se ponga en duda por un lapso de tiempo muy largo, el que esta persona está arrepentida, porque nunca lo confesó al contrario, si no se hubiese descubierto de esa manera, tal vez todavía esta persona lo estuviera ocultando.  Es por ello, que la confesión de una infidelidad conlleva a daños menos perjuiciosos que el hecho de ser descubierto de una manera imprevista.
Cuando la persona es descubierta, es más palpable a la vista de todos, que no estaba tan arrepentida, porque si no hubiese buscado la forma de terminar con todo ello, antes de que se descubriera de forma trágica, pero hay personas que comienzan a sentirse arrepentidos de verdad apenas son descubiertos, porque el choque emocional de sentirse descubiertos de una manera terrible, y saber el choque emocional que también llega a sentir la persona herida, le hace comprender la realidad del asunto, y darse cuenta de que la situación era más grave de lo que pensaba, y a veces esto conlleva a un arrepentimiento genuino.
Después de una infidelidad, lo más importante es estar verdaderamente arrepentido, y tratar de reparar el daño, y sobretodo perdonarse asimismo, y estar dispuestos a esperar que la persona agraviada, pueda ir poco a poco, resolviendo los conflictos internos que puede estar experimentando la persona afectada, y dejarla que vaya sanando poco a poco de acuerdo a su ritmo.
Después de una confesión, muchas veces, lo más difícil es esperar que la otra persona termine de perdonar la falta que le hemos confesado, pero sin embargo, la persona que cometió la infidelidad debe comprender que no es un tema fácil de manejar, ni una situación sencilla de enfrentar, pero, además la persona que ha sido infiel, y quien no haya tenido la oportunidad de confesar el error, sino que fue sorprendido, debe entender que el proceso de perdonar la falta, puede ser más lento, y más difícil de alcanzar en corto tiempo.
Hay personas que al ser descubiertos, todavía aun mantienen conductas impropias con respecto a la situación, tales como; seguir negando la infidelidad aunque está más que evidente, otros responsabilizar al herido, y así como estas maneras de reaccionar, así suceden otros tantos tipos de reacciones incorrectas, pero lo importante al verse al descubierto es reconocer la falta, y no culpar al herido, sino reconocer el error, y luego esperar que el herido vaya sanando, para luego tratar de resolver lo que se destruyó, y aun también tratar de resolver las cosas que conllevaron a la infidelidad, y que nunca se buscaron de resolver, sino que se cometió el error de optar por la infidelidad en su lugar.
La Infidelidad, cuando es confesada o cuando es descubierta, es una experiencia dolorosa y traumática para ambos, es difícil para el que es sorprendido en el error y ya no puede negar lo que ha hecho, y se ha caído la máscara que le protegía para reflejar una imagen de estar bien, cuando no estaba bien.  También sin duda, es más duro aún, para la persona a quien están hiriendo, quien siente que le han estado traicionando vilmente a sus espaldas, y sobretodo la persona a quien ama. No siempre se sabe cómo reaccionar en el momento, no todas las personas reaccionan igual, ni todas las personas saben controlar sus emociones, por eso es que no se puede generalizar acerca de todas las posibles situaciones que puedan presentarse, pero si se puede evitar llegar a esta etapa, siempre y cuando la persona decida confesar su error lo mas antes posible.

Capitulo 4.

Perdonar la Infidelidad


La infidelidad, es una experiencia  muy dolorosa que no siempre puede superarse de una manera rápida, ni tampoco total, porque siempre quedan ciertas afecciones, las cuales sólo pueden curarse, únicamente si la persona herida pone de su parte todo su empeño, pero la persona infiel, también hace toda la contribución posible para tratar de sanar dichas heridas.
Hemos hablado ya previamente, de que es más fácil perdonar una infidelidad cuando se confiesa a tiempo, que cuando es una infidelidad descubierta, sin embargo hay muchos factores los que pueden influir en este respecto, dependiendo de la situación, la persona con quien se cometió el hecho, etc.
Factores que afectan el proceso de Perdón en una relación donde ha habido infidelidad:
-          La Infidelidad se cometió por un largo período de tiempo,
-          La Infidelidad se cometió en el mismo lugar donde convive la pareja,
-          La infidelidad se cometió con algún familiar o amistad de la persona afectada,
-          La Infidelidad ha permitido que el conyugue se haya confundido en sus sentimientos,
-          La Infidelidad, trajo consigo un embarazo,
-          La Infidelidad, se negó muchísimas veces cuando había sospecha de ello,
-          La persona Infiel, siempre ha tenido un estilo de vida, en el que haya mostrado muchas veces, que se sentía atraído con la idea de ser infiel con alguien en particular, o con diferentes personas.
Factores que contribuyen al que proceso de Perdón se acelere:
-          La persona infiel, de verdad da muestra de arrepentimiento
-          La persona infiel, se había mantenido fiel durante muchísimos años de convivencia, y siempre fue respetuoso, y esto parece haber sido un accidente,
-          La Infidelidad, fue un breve tiempo,
-          La Infidelidad, sucedió con alguien desconocido por su conyugue,
-          La Infidelidad, no conllevó a una confusión de los sentimientos.
Además de todo esto, hay múltiples factores Internos que pueden contribuir o afectar el proceso de perdón, y de sanidad de la herida, en la persona afectada por la infidelidad, Ejemplos:
-          La persona herida, ya ha sido maltratada, abusada o traicionada desde la infancia en otras circunstancias y maneras,
-          La persona herida, no tiene a su alrededor personas que la orienten y la ayuden a salir de esa crisis emocional, y sobreponerse a tiempo del dolor causado,
-          La persona infiel, dice estar arrepentido, pero a veces hace cosas que crean dudas,
-          La persona infiel, constantemente se hace la víctima, aun sabiendo que la víctima es el que ha sido traicionado
-          La persona infiel, siempre habla de los errores de su conyugue y nunca le encuentra virtudes,
-          La persona infiel, ya había destruido la autoestima de su conyugue, aun mucho antes de haberle sido infiel,
-          La Infidelidad, es solo un maltrato más, adicional a muchos maltratos emocionales, físicos, o de cualquier tipo, que ya la persona infiel le haya causado a su pareja.

Capitulo 5.

El Trabajo de Reconciliación es en Pareja


Cuando ha habido una infidelidad, y la pareja desea continuar, pero no sabe cómo, lo ideal es comprender de que a partir de ese momento necesitan trabajar juntos para lograrlo, si tratan cada uno por separado, será más difícil conseguirlo, y si tratan de resolverlo sólo es probable de que fracasen en el camino, por ello, lo ideal es conseguir ayuda, y unirse para poder sacar adelante a la familia, solos o separados no lo podrán lograr.
Para salir adelante, necesitan unirse y empezar a caminar juntos, no como “La Victima y El agresor” sino como dos personas que han sufrido un daño terrible en su matrimonio, y que quieren hacer todo lo posible por repararlo, a pesar de que alguno de los dos falló, quieren comenzar de nuevo sin mirar quien hizo mal, y quien hizo bien, lo importante ahora no es buscar culpables, sino buscar ayuda, y empezar de nuevo. Por su puesto, a esta etapa no puede llegarse, si no se ha pasado por un proceso de perdonar a la persona infiel, luego de haberse decidido perdonar, aunque todavía esté la herida, el siguiente paso es reconocer si desean salvar ese matrimonio, que lo ideal es comenzar de nuevo, y tratar de construir de la nada un matrimonio, lo importante es no repetir nada de lo que se había estado haciendo hasta entonces, porque ya queda más que comprendido, que nada de lo que se hizo antes pudo contribuir a que esto no pasara.  Esto no quiere decir, que no se puede retomar cosas buenas que se hacían antes de la infidelidad, sino que hay muchas cosas que se hacían antes, y  que hay que analizarlas si serán necesarias retomarlas, o no tienen ningún efecto positivo hacerlas.
En este punto, es conveniente reflexionar, en el hecho de que ambos conyugues están confrontando emociones muy parecidas, sólo que desde perspectivas muy distintas, y lo único que pueden hacer en esto es unirse y comprenderse en las cosas que experimentan igualmente, aunque por cosas distintas. Veamos algunas cosas que pueden experimentar ambos conyugues, a pesar de que uno es el causante y el otro es el afectado:
1.- Vergüenza,                                      4.- Impotencia,                                     7.- Depresión,
2.- Desilusión,                                      5.- Confusión,                           8.- Desesperación,       
3.- Culpa,                                             6.- Frustración,                         9.- Miedo.
Aunque cueste creerse, luego de una infidelidad, cuando la pareja quiere rehacer su matrimonio de nuevo, ambos pueden sentir estas mismas emociones y sentimientos, solo que son por razones distintas, pero dan los mismos resultados, y estos pueden ser factores que unan o que desunan a la pareja, según la perspectiva como vean la realidad, si realmente desean salir adelante, necesitan unirse en las cosas en común, ayudarse ambos a animarse cuando sientan cualquiera de estos sentimientos, porque ninguno de estos malestares ayudan a salir rápido de ese fracaso, pero uniéndose ambos para combatir cada uno de estos ataques emocionales, pueden salir más rápidamente victoriosos en esta situación.
Después de una infidelidad, muchas veces la pareja termina de destruir su matrimonio, no debido a la infidelidad, sino debido a no saber lidiar con estas emociones, y como no saben canalizar la situación, terminan agrediéndose verbal, psicológica, y emocionalmente, es por ello, que es necesario buscar ayuda externa al respecto, si no se busca ayuda de afuera, ambos conyugues terminarán hiriéndose más,  enfrentándose más, confundiéndose más, atemorizándose más y hundiéndose más.
Mantener una sana comunicación constante entre los conyugues, para conocer el estado de su pareja, como se siente, si ha progresado en el intento, si se le ha dificultado el proceso, entre otras cosas, es  uno de los factores más favorables, sobretodo si va acompañada de tolerancia, respeto, paciencia, amor, y todas las virtudes que puedan ayudar a sanar un alma herida.

Capitulo 6.

Ayuda Externa


En ocasiones, las personas afectadas por una infidelidad, lejos de resolver sus problemas quedan atrapados en un enredo mayor, cuando intentan resolver sus situaciones con personas inadecuadas. La Infidelidad, es un tema muy serio, y si se desea recibir ayuda, debe hacerse con las personas correctas, porque de no ser así, el daño puede ser mayor.
Consejos al respecto:
-          No es saludable, solicitar consejos de personas familiares de algunos de los cónyuges,  sobretodo si es una persona que tiende a parcializarse a un solo lado,
-          No es saludable, solicitar ayuda de personas que ya han tenido separaciones, y ven a todos los matrimonios, como algo que puede romperse y dejar de seguir casados por cualquier causa,
-          No es saludable, solicitar ayuda de personas que quieren tomar decisiones por encima de la pareja,
-          Es bueno consultar a expertos en el tema,
-          Si va a buscar amigos, busquen amigos en común, personas que no se vinculen con un solo conyugue, (menos si es de otro sexo),
-          Lo más aconsejable, es que las personas que traten de ayudar, le brinde ayuda a ambos conyugues, no se parcialice a ayudar solo a el afectado, o a la persona infiel, sino que trate de ayudarlos a ambos,
-          Permitirse ayudar muchas veces requerirá compartir asuntos privados que no son fáciles de exponer ante otras personas, por ello, es importante conocer que cosas son necesarias hablarlas con el consejero, y que cosas deben mantenerse en privado, (sobretodo decidirlo en pareja, es delicado sacar a relucir cosas, en las cuales el otro conyugue no se sienta cómodo con la decisión, al menos que sea exclusivamente necesario acotarlas).
-          Busque información sobre el tema, revistas, programas de tv, libros, especialistas, matrimonios que se han restaurado luego de una infidelidad y quieran ayudarles, pastores, profesionales de alguna profesión que se relacione con este tipo de situaciones a menudo, etc.
-          Reflexione, en que juntos no solamente van a trabajar la infidelidad, sino todos los asuntos concernientes al matrimonio, (absolutamente todo lo que tenga que ver con relaciones de pareja).
-          Es necesario y obligatorio, que ambos conyugues se amen, porque de lo contrario, será muy poco lo que podrá lograrse, si ambos conyugues o alguno de ellos, insiste en estar confundido en cuanto a sus sentimientos, o crea que ya no ama a su pareja.
-          La persona ofendida, tiene que haber perdonado, o por lo menos haber decidido en serio perdonar, aunque aun le cueste un poco hacerlo, si este paso no se ha dado, será muy poco lo que pueda ayudar la ayuda externa, a menos que la persona herida se deje sanar,
-          La persona infiel, debe dejarse ayudar, y no poner barreras para no sentirse atacada, cuando tenga que reconocer en público, o que le hagan ver en público su error.
-          Dios, es la mejor ayuda tanto externa como interna que ambos conyugues puedan experimentar, bien sea, el conyugue infiel, como el conyugue afectado, ambos, pueden refugiarse en Dios, y solicitar ayuda de gente que entienda esta realidad espiritual, y les permitan alcanzar sus éxitos, entrando en estrecha comunión con Dios, muchos pueden ser los intentos que se den sin Dios, pero ningún intento será mas efectivo que haciéndolo con ayuda de él.


Autor:
María de Los A Pérez





No hay comentarios:

Publicar un comentario

Puedes dejar tus comentarios (favor no realizar comentarios obscenos o que puedan ser ofensivos para otros usuarios y para el titular de este blog)

BIENVENIDOS A MIS CURSOS ONLINE

Esta puede ser tu Aula Interactiva para que puedas aprender!! y compartir tus aprendizajes con otros
Powered By Blogger